Louis Vuitton y Yayoi Kusama: una colaboración sin punto final
Sacerdotisa de un arte total, hipnótico y colorido, la artista japonesa Yayoi Kusama es conocida en todo el mundo como una artista de vanguardia. Fiel a su firma a lo largo de los años, aplica sus motivos hasta el infinito, invadiendo por completo el espacio.
Desde sus modestos comienzos en 1929, en Matsumoto, Japón, Kusama mágicamente y con determinación transformó su propia vida. Haciendo girar el encanto del poder de su arte mientras realizaba búsquedas aventureras en el resto del mundo en las décadas de 1950 y 1960, desde Tokio hasta Nueva York, se rescató a sí misma en el proceso. Ella es la artista que ha dado un vistazo al infinito en su obra y, después de lo que pareció una pausa en el mundo exterior cuando regresó a Japón en la década de 1970, ha emergido como quizás la artista global preeminente del siglo XXI. Century y sin duda la artista femenina viva más exitosa.
La última vez que Louis Vuitton conoció la magia de Yayoi Kusama fue en 2012. Sin embargo, esta relación nunca terminó; diez años después, evolucionó y se expandió con conversaciones continuas y extendidas. Louis Vuitton tiene una larga historia de trabajo con artistas, que se remonta a hace casi un siglo, cuando el nieto del fundador del mismo nombre y esteta de la familia, Gaston-Louis Vuitton, comenzó a encargar a los artistas que crearan escaparates y obras para las propias tiendas.
Este ímpetu ha viajado a través del tiempo y ha tenido aún más resonancia en la era contemporánea; desde 1988, la Maison ha invitado a colaborar a algunos de los nombres más importantes del arte y el diseño, incluidos Sol LeWitt, Richard Prince, Takashi Murakami y Jeff Koons, entre otros. Aquí, los objetos, motivos e imaginaciones del infinito característicos de Kusama se apoderan de la Maison y todas sus categorías de productos: desde bolsos hasta ropa de hombre; ropa de mujer a gafas de sol; fragancias para zapatos y accesorios. A su vez, hay una evolución de algunas de las piezas emblemáticas de Louis Vuitton, haciéndolas parte igualmente de su propio mundo transformador y el de Kusama.
En línea con las colaboraciones artísticas pasadas de Louis Vuitton, el encuentro entre la Maison y Yayoi Kusama se basa en la sinceridad, la iconoclasia y, sobre todo, en la apreciación mutua de la artesanía y la excelencia por encima de lo común. En Louis Vuitton, cuando se trata de la magia de hacer objetos, todo es posible. Tal vez sea más apropiado que esta encarnación del intercambio creativo entre Louis Vuitton y Kusama comience donde terminó la conversación de 2012, con un regalo. Un regalo que abarca sus dos mundos más completamente.
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En 2012, Yayoi Kusama tomó uno de los objetos emblemáticos más atemporales y mágicos de la Maison y lo hizo suyo: pintó a mano un baúl Louis Vuitton con sus característicos lunares, puntos que, para Kusama, representan el infinito. Es una réplica exacta de estos puntos, una verdadera representación de la mano de Kusama que es una de las muchas cosas en el proyecto que ha desafiado y avanzado el savoir-faire de la Maison. Cada encarnación de los lunares ha sido presidida personalmente por Kusama, al igual que todos los muchos y variados objetos del proyecto, que se mueven con precisión al milímetro, las pinceladas se repiten con un detalle asombroso con su textura y peso intactos. Es en esta búsqueda del infinito a través de la artesanía que tanto Louis Vuitton como Yayoi Kusama están finalmente unidos. Es en la creación de objetos mágicos que trascienden el espacio y el tiempo en lo que ambos se involucran y se reconocen mutuamente. Es aquí donde tanto Louis Vuitton como Yayoi Kusama quieren que la persona que posee tales objetos sienta tanto el cuidado como la inversión emocional que supuso fabricarlos; para convertirse en parte de su historia y que, con suerte, se convertirá en parte de la historia de las generaciones futuras,
extendiéndose hasta el infinito.
Las colecciones
¿Cuándo la moda va más allá de la moda? Tal vez cuando está hecho con la eternidad y el infinito en mente. En las colecciones del proyecto, la idea de proliferación es primordial. Los motivos en cascada, sus cualidades y la noción de infinito reflejada en la expansión de las colecciones, recogiendo las piezas icónicas de la Maison y transformándolas en el camino, reflejan el proceso y los temas de Kusama mientras prueban y amplían los límites del savoir de Louis Vuitton. Y es quizás en la apoteosis de la artesanía donde existe la idea de lo eterno tanto para Louis Vuitton como para Yayoi Kusama.
Al mismo tiempo, hay una noción de cómo el infinito puede traducirse, de cómo puede llegar a las personas y hacerse funcionar en lo cotidiano, de cómo toca a las personas y las transforma. Después de todo, se trata de ropa y accesorios, y lo que siempre se busca es una participación alegre al usarlos; esto es algo que Kusama no es ajena a su arte y Louis Vuitton entiende a través de la artesanía.
Abarcando los universos de mujeres y hombres a través de prêt-à-porter, bolsos, zapatos, accesorios, maletas y baúles y fragancias, , estas colecciones amplias e intrincadas aparecen en dos partes, con distintas direcciones temáticas que reflejan los motivos y motivaciones de Yayoi Kusama. Drop 1 se lanzó el primero de enero de 2023 en China y Japón, seguido del resto del mundo el 6 de enero. Drop 2 estará disponible en las tiendas Louis Vuitton a partir del 31 de marzo de 2023.
Drop 1: colecciones painted dots, metal dots, infinity dots y flores psicodélicas
Un vistazo inicial de la colaboración Louis Vuitton x Yayoi Kusama tuvo lugar en San Diego en mayo de 2022, durante el desfile Louis Vuitton Cruise 2023. Aquí, se mostraba la forma de lo que vendría en una serie de accesorios que pertenecen a la gota 1 de este proyecto.
El motivo de puntos pintados es donde tiene sus raíces este proyecto y aquí, son una traducción directa de la mano de Kusama a través de una compleja técnica de serigrafía e impresión en relieve sobre cuero o lona revestida icónica. Los motivos de Kusama han viajado con ella durante la mayor parte de su vida; comenzó a pintar sus puntos cuando aún era una niña de diez años.
Aquí, aparece una proliferación en prêt-à-porter, marroquinería, accesorios y fragancias, desde una iteración colorida de los puntos fieles a la obra de arte original hasta una gradación de negro, plata, gris y blanco específicamente para hombres. Hay una divertida reunión de los puntos pincelados característicos de Kusama con el monograma de Louis Vuitton que se encuentra a lo largo de esta colección.
Desde maletas rígidas y una plétora de bolsos de lona suave Monogram, íconos de la Maison para mujeres y hombres, pasando por botines, zapatillas y zapatos Derby, hasta prendas prêt-à-porter du nylon técnico para hombres, en forma de plumífero Monogram con lunares y pantalones tipo cargo. Los puntos pintados continúan su proliferación a través de artículos de cuero adicionales como los Capucines blancos y los bolsos Dauphine negros, así como una falda de cuero negro con botones de pinceladas multicolores; luego en pijamas de sarga de seda listos para usar, jeans con estampados intrincados y prendas de punto de cachemira para mujeres con prendas de vestir exteriores para hombres, en forma de un abrigo de lana pura estampado con precisión. Los accesorios se multiplican, desde sombreros de pescador reversibles, bufandas de seda y joyas de cadena Edge en el mundo femenino hasta gorras de béisbol, cinturones y gafas en el masculino. Los puntos pintados de colores y en escala de grises también viajan al reino de las fragancias de la Maison, envolviendo tanto los envases, las botellas y los estuches de viaje de Attrape-Rêves y L’Immensité.
La colección metal dots es un destello del infinito inspirado en los orbes espejados de Kusama, un motivo familiar de su Narcissus Garden, mostrado (extraoficialmente) en la 33ª Bienal de Venecia en 1966. Aquí, los orbes plateados de diferentes tamaños se colocan con precisión exacta por mano, incrustada en artículos de cuero negro y plateado para mujer, rodeando un bolso Cannes o proliferando en un suave Side Trunk, mientras se presenta casi como un degradado de la era espacial en los elegantes Capucines. La proliferación continúa mientras orbitan los mocasines Academy y están en el mostrador de los tenis altos Squad. Son más «futuristas de los años sesenta» cuando se aplican como un degradado a las prendas de cuero de cordero, como una chaqueta de motorista plateada y un mini vestido de cuero plateado afilado.
El punto pintado se transforma en los quizás más familiares infinity dots de Kusama; el motivo más reconocible de la artista y como colección, que abarca la mayoría de las piezas del proyecto en todas las categorías tanto para mujeres como para hombres, apareciendo tanto en Drop 1 como en Drop 2. A medida que la fama de Kusama creció en Estados Unidos en la década de 1960, fue apodada la «La princesa de los lunares«. Aunque, por el contrario, Kusama se ha referido a sí misma como una «artista obsesiva». Es el punto infinito el más obsesivo de sus motivos, lo que significa un estado de «autodestrucción» para la artista. “Mi deseo era predecir y medir el infinito del universo ilimitado, desde mi propia posición en él, con puntos”, dice Kusama en su autobiografía Infinity Net.
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Proliferando en las paletas distintivas de Kusama de blanco y negro, rojo y blanco, amarillo y negro, además de negro y rojo para hombres, los puntos infinitos se fusionan con una multiplicidad de íconos de Maison, particularmente en términos de artículos de cuero, zapatos y siluetas. Los puntos infinitos se transforman con el Monogram en artículos de cuero como el Empreinte Neverfull en relieve, pero también encuentran forma en bolsos Epi como Twist o Taurillon Capucines. Mientras que para los hombres, Taurillon se utiliza para gran parte de la caída inicial de artículos de cuero con puntos infinitos, incluidos el clásico Keepall y el Soft Trunk. Tejidos en jacquards y tejidos de punto 3D, estampados en sedas y con apariencia de bordados, los puntos infinitos encuentran la elegancia de lo cotidiano cuando se presentan para las mujeres en las siluetas exclusivas de Louis Vuitton, como la gabardina corta y estampada nítida que gira en el traje de falda y entra en un reino más utilitario para hombres en artículos como el blusón de polar técnico y la sobrecamisa con cremallera. Para los zapatos, una proliferación de puntos incluso toma forma en las suelas y la parte inferior de modelos como los botines y zapatos de salón Shake. Mientras que los detalles metálicos de los mocasines Academy están esmaltados y se repiten en joyas con puntos infinitos. Para los hombres, el LV Trainer presenta su propia paleta de puntos; sobre una base de piel de becerro flor blanca, aparecen puntos negros sobre blanco y verdes sobre blanco, junto con una iteración de blanco sobre rojo. También incluye una miríada de otros accesorios, que incluyen pañuelos de seda exclusivos, gafas de sol, sombreros de pescador reversibles, gorras de béisbol e incluso la muñeca ‘Vivienne’, una versión de la propia Kusama. Los puntos infinitos también extienden su alcance al reino de la fragancia con, apropiadamente, el obsesivo Spell on You.
Otra obsesión de Kusama existe en sus flores; la belleza fugaz de lo efímero se contrasta con el sentido de lo eterno e infinito, pero hecho permanente a través de su obra. Utilizando la pintura Flower algo psicodélica de 1993, una flor exótica se despliega a través de accesorios y prêt-à-porter para hombres y mujeres. En su iteración más formal para hombres, este floral distintivo se realiza intrincadamente como un jacquard en un traje sastre de lana y como un fil coupé en una camisa de algodón. Incluso un blusón universitario más informal presenta un bordado excepcional de la flor. Los artículos de cuero para hombres, como la riñonera Taurillon Monogram, Sac Plat y Keepall, utilizan elegantes estampados en relieve sobre cuero blanco para resaltar la belleza y la complejidad de la flor. Mientras tanto, se adopta un enfoque más estridente con los bolsos Capucines para mujer, con el motivo ampliado para abarcar los bolsos completamente en negro o rojo en Taurillon. Una falda cruzada y un top cortos de jacquard adoptan un enfoque similar para las mujeres, imitando el enrollamiento y el despliegue de la gran flor en blanco y negro.
La colaboración de Louis Vuitton x Yayoi Kusama se celebrará dentro de un paisaje visual totalmente inmersivo, que va desde escaparates, ventanas emergentes, vallas publicitarias anamórficas, junto con experiencias AR, un juego XR y una campaña publicitaria dedicada. Una toma de posesión excepcional de la ciudad de Tokio comenzó el 29 de noviembre.